La
respuesta a esta simple pregunta espero que os aclare las dudas para mantener
la continuidad del entrenamiento durante todo el año.
Todo se
debe al Principio de Reversibilidad.
Este
principio nos dice que las
mejoras conseguidas después de realizar un programa de ejercicio físico, no se
mantienen eternamente si dejamos de hacer ejercicio. Todas las mejoras
alcanzadas durante el entrenamiento disminuyen a bastante velocidad en el tiempo que estemos parados.
Al
cabo de 2 ó 3 semanas ya veremos esa pérdida y después de unos meses todos
nuestros beneficios desaparecen…
Pérdida
a corto plazo
|
Pérdida
a largo plazo
|
|
Resistencia
máxima
|
-8
al 10%
|
-18
al 20%
|
Rendimiento
cardiaco
|
-8
al 10%
|
-10%
|
Resistencia
muscular
|
-2
al 5%
|
-7
al 10%
|
Energías disponibles en el músculo
|
-25
al 50%
|
|
Fuerza
muscular
|
-35
al 40%
|
Cuadro de pérdida en % del rendimiento
cardiovascular y muscular a corto y largo plazo tras una actividad (Neufer,
1989).
La pérdida
de resistencia la sentiremos en el consumo máximo de oxígeno por una
disminución del volumen sanguíneo en músculos y volumen máximo sistólico, lo
que conlleva a una disminución del rendimiento cardiaco. Llegando a ser de un
10% al cabo de unas semanas. Esto quiere decir que en una persona que entrena
durante 2 meses regularmente la resistencia, la perdería al cabo de 8 semanas.
Si
hablamos de la fuerza sentiremos una disminución de la masa muscular porque se
reduce el volumen de vasos sanguíneos que irrigan los músculos.
Por lo
tanto debemos mantener nuestro entrenamiento bajando la intensidad del mismo pero
sólo hasta un 50%, si no queremos empezar desde cero a la vuelta de las
vacaciones.
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